¿Qué es el tipo marginal del IRPF y cómo afecta a la declaración de la renta?
Borja Carrascosa Nogales
Consultor, con una experiencia de más de seis años; periodista con 16 años de trayectoria como analista económico y financiero y MBA por IE Business School.
El tipo marginal del IRPF (Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas) es la retención adicional y más alta que tiene que pagar un contribuyente si supera en un euro, o más, determinado nivel de renta establecido. En España, este impuesto es progresivo, por lo que cada tramo de renta tributa a un porcentaje distinto y creciente.
¿Cómo son los tramos de renta del IRPF?
Concretamente, y a efectos del cálculo de los tipos marginales, la Agencia Estatal de Administración Tributaria (AEAT) establece una serie de horquillas de renta y retenciones. Esta tabla es con carácter general, pero son las comunidades autónomas las que gestionan y recaudan la mitad del impuesto. Esta cesión de competencias les permite modificar y aplicar sus propios tipos, hasta un máximo fijado por el Estado:
| Desde | Hasta | Cuota | Tipo marginal |
| 0 € | 12.450 € | 0 € (bonificado) | 19% |
| 12.450,01 € | 20.200,00 € | 2.365,50 € | 24% |
| 20.200,01 € | 35.200,00 € | 4.225,50 € | 30% |
| 35.200,01 € | 60.000,00 € | 8.725,50 € | 37% |
| Más de 60.000,01 € | 45% |
A este respecto, conviene diferenciar el tipo marginal del tipo efectivo. El primero es el tipo máximo que paga un contribuyente por una parte de su salario mientras que el segundo refleja la retención media que sufre el contribuyente en su declaración de la renta.
También conviene recordar que el Gobierno ha aprobado dos nuevos tramos a nivel estatal, que todavía no ha anunciado cuándo se aplicarán. El sexto va desde los 130.000 a los 300.000 euros (tipo marginal del 47 por ciento) y el séptimo, por encima de los 300.000 euros (retención del 49 por ciento).
¿Cómo afecta a mi declaración de la renta?
Los tipos marginales del IRPF establecen que, cuanto más se ingresa, más se paga. Por lo tanto, cuanto más abultada sea nuestra cifra de ingresos, más impuestos abonaremos a Hacienda. Veámoslo con un ejemplo, aplicando los tipos generales a nivel estatal (una vez descontadas las cuotas a la Seguridad Social y sin desgravaciones relevantes).
Imaginemos un contribuyente que ha declarado una renta de 38.000 euros en 2019. Los primeros 12.450 euros están exentos de tributación. Por los restantes 25.550 euros, pagaría un 24 por ciento por los primeros 7.750 euros (1.812 euros); un 30 por ciento, por los siguientes 15.500 euros (4.650 euros), y un 37 por ciento por los restantes 2.300 euros (851 euros).
En total, pagaría un tipo efectivo (o medio) del 19,2 por ciento, un total de 7.313 euros, que es la retención que ha sufrido su salario. El tipo marginal (también llamado último) se situaría en el 37 por ciento.
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