¿Cuántos planes de pensiones puedo tener?

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Redactor especializado en MAPFRE

El equipo de redacción de MAPFRE especializado en temas laborales. Lleva más de 10 años preocupándose por tus ahorros y porque sigas manteniendo una buena calidad de vida en el momento de la jubilación. Pero no solo eso, aquí encontrarás información útil y práctica sobre relaciones laborales, impuestos, prestaciones y mucho más.

Los años de experiencia de MAPFRE en el sector nos avalan como fuente de información veraz y práctica para acompañarte en las diferentes etapas de tu vida.

Quizás muchos ahorradores tuvieran dudas sobre la posibilidad de suscribir distintos planes de pensiones. Pero lo cierto es que no hay ningún impedimento para ello. Es más, es muy recomendable porque así no pones todo los «huevos en la misma cesta». Si tienes un plan de pensiones en el que predominan activos de renta fija, puedes tener otro en el que predomine la renta variable. Se trata de combinar distintas estrategias inversoras.

Motivos para tener más de un plan de pensiones

Legalmente no hay nada que lo impida y de hecho, si puedes permitírtelo, tener dos o más planes de pensiones es una estrategia muy inteligente que te permitirá ahorrar más y reducir tu riesgo de inversión. Atento a las principales ventajas.

Nada impide que dispongas de dos planes de pensiones

Cuando tu nivel de ahorros y/o ingresos lo permite, tener varios planes de pensiones te permite tener una inversión diversificada y conjugar detalles como el riesgo y la rentabilidad para conseguir los mejores resultados para tu dinero.

Para diversificar tu estrategia los planes pueden tener distinta vocación inversora

Un ejemplo: contratas un plan conservador de rentabilidad fija al 1 por ciento y uno de renta variable que ofrece un 2 por ciento. Si tus aportaciones son idénticas en ambos planes, la rentabilidad media será del 1,5 por ciento.

Puedes rescatarlos cuando y en la forma de cobro que quieras, ambos son independientes

Los planes de pensiones ofrecen diferentes modalidades para que el titular pueda elegir la forma de inversión y ahorro que prefiera y que mejor se adapte a su caso, especialmente importante es valorar la edad y contar con el tiempo que resta hasta la jubilación del titular.

Aunque otra posibilidad es contratar un plan de pensiones con la misma vocación inversora del que ya tengas. Por ejemplo, tu perfil es conservador y prefieres no arriesgar en la inversión sino que sea más segura. En este caso, podrías ahorrar con dos planes de pensiones con la mayoría de la cartera de renta fija. Algo que se produce con frecuencia es una persona que cuenta con un plan de pensiones de empresa y decide abrir otro individual para asegurarse una vejez sin estrecheces económicas. También se recomienda complementar el ahorro del plan de pensiones con otro producto en auge: los planes individuales de ahorro sistemático (PIAS). Estos seguros tienen más liquidez que los planes y aseguran una rentabilidad.

Cuando tienes dos planes de pensiones puedes cobrar los dos en años diferentes y con la modalidad de cobro que prefieras. Son independientes. Cuando has aportado a los planes antes de 2007 puedes reducir el 40 % si lo rescatas en forma de capital (en un solo pago). Pero esta exención solo puedes aplicarla una vez. Así que lo recomendable para poder obtener todo la reducción es que los unificaras para rescatarlos.

Y, por supuesto, consulta los planes de pensiones MAPFRE que te ofrecemos para complementar tu pensión de jubilación.

Atención: Ventajas fiscales de tener varios planes

Una de las razones más frecuentes para contratar un plan de pensiones son las ventajas fiscales que proporcionan. Es importante que no te equivoques al valorar esta ventaja, aunque seas titular de más de un plan de pensiones las deducciones fiscales no se multiplican.

La Agencia Tributaria marca límites para el dinero invertido en un plan de pensiones que tiene derecho a desgravación fiscal, no se habla de número de planes de pensiones, sino del total de capital ingresado por el titular con independencia que sea en un solo producto o en varios.

El importe máximo que puedes deducirte en la declaración de IRPF a cuenta de tus aportaciones a planes de pensiones es de 1.500 euros o el 30 por 100 de la suma de los rendimientos netos del trabajo y de actividades económicas percibidos individualmente en el ejercicio.

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