Negociar un despido ante una baja voluntaria
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Los años de experiencia de MAPFRE en el sector nos avalan como fuente de información veraz y práctica para acompañarte en las diferentes etapas de tu vida.
Por distintas circunstancias es posible que se produzca un cese de la relación laboral entre un trabajador y su empresa. Es posible que la decisión la haya tomado el empleado o la compañía, en ambos casos es importante conocer cómo negociar un despido de forma satisfactoria. Es posible que la decisión la haya tomado el empleado o la compañía, en ambos casos es importante conocer cómo negociar un despido de forma satisfactoria.
Fin de la relación laboral
El fin de la relación laboral entre un trabajador y su empresa puede producirse por distintos motivos, ya sea por voluntad del propio empleado o por parte de la compañía.
Es importante conocer este detalle, ya que, dependiendo de ello, el trabajador tendrá o no derecho a indemnizaciones, prestación por desempleo, etc.
El trabajador decide finalizar la relación con la empresa
Este procedimiento de baja voluntaria está contemplado para que cualquier empleado pueda dejar su puesto de trabajo cuando lo estime oportuno, aunque su contrato no haya finalizado.
Esto quiere decir que cualquier trabajador puede irse libremente de su empresa cuando quiera, pero, a cambio tendrá una serie de penalizaciones por haber roto la relación laboral.
Cuando un empleado solicita la baja voluntaria a la empresa pierde el derecho a recibir por parte de la compañía una indemnización por despido. Además de ello, al recurrir a este tipo de despido tampoco se tendrá derecho a recibir una prestación por desempleo.
Normalmente, esta opción es usada por personas que abandonan su puesto de trabajo por comenzar a trabajar en otras compañías.
La empresa finaliza la relación laboral
En el caso de que sea la empresa la que decida finalizar la relación laboral con su empleado, podrá aplicar dos tipos de despido:
- Despido procedente: es aquel que se produce cuando hay causas justificadas para hacerlo ya sean esta disciplinarias, económicas… En estos casos, siempre que no sea por motivos disciplinarios, el trabajador tendrá derecho a percibir una indemnización por parte de la empresa y su prestación por desempleo.
- Despido improcedente: se da cuando no hay motivos objetivos para el fin de la relación laboral en la que el trabajador recibirá una compensación económica por parte de la empresa y su prestación por desempleo.
¿Puedo optar a una indemnización tras una baja voluntaria?
A pesar de que el trabajador sea el que renuncie de forma voluntaria a su trabajo y decida romper el contrato firmado, existen algunas excepciones en la que podrá solicitar este tipo de compensación económica por parte de la empresa.
Los casos son reducidos, pero pueden darse cuando se produzca alguna de estas situaciones:
Cuando exista cambio de ubicación del centro de trabajo
Si el trabajador decide finalizar su relación laboral con la empresa por este motivo, tiene derecho a percibir una compensación económica por ello, que se sitúa en los 20 días por año durante un máximo de 12 meses.
Cuando se modifiquen las condiciones de trabajo
Para que ello sea un motivo justificado de baja, será necesario que estas condiciones sean importantes. En estos casos, será posible recibir una compensación económica equivalente a 20 días por año durante un máximo de 9 meses.
Cuando haya incumplimientos graves por parte de la empresa
Se consideran incumplimientos graves por parte de la empresa todos aquellos que tengan que ver con los impagos, el retraso continuado en el abono del sueldo u otras de tipo personal como pueden ser el acoso.
Si te encuentras en esta situación y decides solicitar la baja de forma voluntaria tendrás derecho a solicitar una indemnización que será equivalente a la de un despido improcedente. Así, el trabajador tendrá derecho a su prestación por desempleo y una compensación de 33 días por año durante un máximo de dos años.
Claves para negociar un despido
http://bit.ly/2wWNlbk
Si te encuentras en alguno de los supuestos anteriores podrás negociar tu despido para poder percibir una compensación económica por ello es importante no incurrir en una serie de errores y aplicar una serie de directrices:
- Intenta negociar con la empresa antes de solicitar la baja voluntaria y explícale qué te lleva a ello. Podréis llegar a un acuerdo en el que los dos salís ganando ya que la compensación que deberá pagar la empresa será menor que en el caso de un despido improcedente. Además de que el acuerdo puede implicar la renuncia del trabajador a reclamar su despido posteriormente. Por su parte el trabajador conseguirá no perder su derecho al paro.
- La prestación por desempleo no debe ser elemento de intercambio ya que si el despido se trata como improcedente no siéndolo la empresa puede sufrir graves consecuencias y el trabajador puede verse obligado a devolver todas las prestaciones recibidas.
- No fuerces el despido: esto puede provocar un despido disciplinario en el que perderías tus derechos tanto de indemnización como de paro.
- Ten en cuenta tus fortalezas: apuesta por un tono conciliador y para mostrar tus puntos de vista. Puedes indicar a tus responsables por qué motivos te vas de la empresa y cómo ambos podéis llegar a un acuerdo para solventar el problema de la mejor forma posible.
- Usa a tu favor la información de la empresa: si llevas varios años trabajando en la empresa podrás usar estos datos a tu favor para conocer cómo puedes actuar a la hora de reclamar un acuerdo favorable.
Ante estas situaciones lo mejor es emplear el sentido común para no errar a la hora de romper una relación laboral de manera unilateral.
Por último, recuerda que, si tienes contratado un plan de pensiones como los que te ofrece MAPFRE, puedes sentirte respaldado ante una situación de paro de larga duración,
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